A las siete de la mañana de un gélido día, la señora Patricia reunió a todos los empleados en la cocina antes de que se pudieran retirar a dormir. A todos les invadía la curiosidad. La Señora solo les reunía para informarles de alguna fiesta que se fuera a celebrar, pero esa mañana su cara era diferente, algo andaba mal y los empleados comenzaban a inquietarse.
Patricia les comunicó que uno de los huéspedes había sido robado y amenazaba con poner una querella al hotel y ella con despedirles a todos si no aparecía el culpable antes de finalizar el día. Tras repasar los sucesos ocurridos la noche anterior Patricia dedujo que solo dos personas podían haber llevado a cabo el robo: Carlos, el camarero, a quién algunos huéspedes vieron salir de la habitación la noche anterior, y Cecilia, la doncella, que fue la última en recoger. Pero ambos negaban haber robado.
Comenzaba a anochecer y el incurso seguía sin aparecer. Justo cuando Patricia colgaba el teléfono y se disponía a llamar a la policía el señor Bermudez irrumpió en su despacho para agradecerle el haber recuperado su reloj. Patricia no daba crédito a lo que oía y decidió contratar un detective para que investigara lo ocurrido.
Tras dos largos días en el hotel el detective llegó a la conclusión de que...
Ahora es vuestro turno, tenéis que inventar dos finales para esta historia
Hola soy Alejandro
ResponderEliminarTe mando este comentario para que por favor me pongas la tarea 3.
saludos Alejandro.